Diego empleó diferentes tipos de pinturas a lo largo de su vida artística, dato importante dentro las tecnicas de velazquez todos de excelente calidad, lino o cáñamo, y los elegía cuidadosamente en función de los efectos finales que esperaba obtener. También según el soporte aplicaba diferentes preparaciones.
Cualquier artista hacia lo mismo, elegía el soporte y en función de él aplicaba una preparación diferente, escogía los pigmentos y disolventes adecuados a la técnica que iba a emplear y así buscaba encontrar los resultados apetecidos.
La mayoría de los cuadros de aquella época que existen en el Prado están hoy día reentelados, pero curiosamente ocho cuadros se exhiben sin modificaciones, lo que permite analizar con gran fidelidad la propia tela, las descargas de color, el grosor de las pinceladas e incluso la manipulación de las propias telas, parches, añadidos o recortes. Nos podemos referir a “La Coronación de la Virgen María” o al “Mercurio y Argos”.
Aplicación sobre el lienzo.
Y comienza el trabajo de pintor, es interesante que lo estudiemos en detalle, nos dará mucha información sobre la técnica pictórica de nuestro personaje. Por ejemplo la administración de las pinceladas sobre el lienzo.
Los exámenes radiológicos han contrastado que esto de las pinceladas no era un tema banal, en algunos cuadros son grandes y largas, en otros son pequeñas y muy alternadas, en otros las pinceladas iniciales están peinadas, alisadas a pincel y se aprecia que en función de estas pinceladas los fondos tienen mayor o menor trabajo y dedicación, a pinceladas largas y uniformes corresponden fondos más complicados y trabajados.
La paleta de Velázquez.
Es bastante reducida, conocemos que, salvo puntuales excepciones, utilizó siempre los mismos pigmentos de origen orgánico, lacas e insectos, o inorgánicos, minerales, realizando las moliendas en su propio taller, vigiladas por el propio pintor.
Es de remarcar que Velázquez siempre utilizó pigmentos de la mejor calidad posible, aceites súper refinados preparados y depurados, por lo que sus pinturas han llegado hasta nuestros días en una estado admirable, apenas han envejecido manteniendo perfectamente su colorido.
Para la aplicación sobre el lienzo utiliza un aglutinante proteico, (grasas, yemas de huevos) cuya proporción con los aceites necesarios para diluir los pigmentos se hace en función de la transparencia que se quiere obtener, así usa mezclas más densas en las capas correspondiente a imágenes de primer plano y aplicaciones más diluidas cuando se trata de tratar fondos.
Como recursos técnicos de alto nivel usa la calcita (carbonato cálcico) y algunos esmaltes, detalle importante dentro de la técnicas de Velázquez, los utiliza como secativos y que mezclados con pigmentos, como el lapislázuli azul, le sirven para obtener unas transparencias agrisadas utilizadas en los fondos.
Hablemos ahora de los pigmentos y colores.
También cambia la imprimación, a partir de esta etapa usará la llamada “tierra de Esquivias” una tierra rojiza muy de moda en la época.
Su viaje a Italia cambia enormemente su filosofía artística, allí nace su idea de buscar telas cada vez con hilos más finos, lo que favorece pincelas más “sueltas” y rápidas. En Italia pinta “La fragua de Vulcano” y “La túnica de José”, consulta aquí la biografía de Diego Velazquez, donde emplea un pigmento de amarillo de Nápoles, en las versiones clara y oscura, que nunca más se encontrara en sus cuadros. Pero en “La fragua” Velázquez parece haber encontrado su camino, cambia la preparación del lienzo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario